Rasiglia, la pequeña aldea de Foligno y perla del Val Menotre, es conocida a nivel nacional como «la pequeña Venecia de Umbría» por la presencia de numerosos arroyos, cascadas y charcos de agua que rodean todo el pueblo.
La mejor manera de imaginar esta belleza única es a través de las palabras del poeta Marco da Rasiglia:
“Solo me encuentro en este lugar alpino
al pie de una montaña sagrada y gloriosa
Donde entre las piedras vivas surge un manantial
que las aguas murmuran un poco…”